Quinto aniversario de mi sobrina, una niña que es seguidora acérrima de las princesas Disney y, especialmente, de los personajes de una de sus últimas películas: "Frozen: el reino del hielo".
El tema lo tenía claro, tenía tiempo para trabajar el proyecto y eso me permitió planificar algunos extras como los que os explicaré a continuación.
Creo que este ha sido mi trabajo más impactante (junto con el pastel de las
tortugas ninja) y por eso voy a hacer dos entradas, una típica describiendo la creación del pastel y otra con los detalles del día de la celebración.
Esta vez tenía bastante clara la idea desde un buen principio, por lo que sólo recurrí a mi equipo de asesores en busca de soluciones puntuales.
Por un lado, pedí prestados a mi cuñada los personajes de la película (Elsa, Ana, Olaf y Kristoff.... alguien no ha visto Frozen todavía? Pues yo os la recomiendo) para utilizarlos en la composición. (era absurdo tener que comprarlos cuando ya los tenía)
Por otro lado, azucé a mi asesor principal para que me consiguiera una imagen de alta calidad que me sirviera de "fondo de paisaje" y la personalizara con el nombre de mi sobrina.
Una vez solucionados estos detalles logísticos, empecé con la construcción del pastel.
Nota para los que no habéis visto la película: Elsa y Ana son dos hermanas que, tras la muerte de sus padres quedan como herederas de un país con un clima gélido. Elsa, la hermana mayor y reina regente, tiene poderes que le permiten generar nieve, hielo y frío e incluso darles forma (de ahí, entre otras cosas, sale Olaf, el muñeco de nieve). Debido a un accidente con su hermana cuando eran pequeñas, sus padres se ven obligados a separarlas y prefieren ocultar los poderes de Elsa a los ojos del público. Cuando Elsa obtiene la mayoría de edad, se abren las puertas de palacio al público y, a la vista de todo el mundo, Elsa no puede controlar su poder, con lo que prefiere escapar a las montañas para vivir allí en solitario. Al llegar a las montañas, se construye con sus propios poderes un espectacular palacio de hielo. Y es justamente en esta parte donde se basa este pastel.
Para conseguir la base de la montaña necesitaba bizcocho, mucho bizcocho. Además, dado que iba a venir bastante gente a la fiesta de mi sobrina, pues ya me iba bien que así fuera.
Hasta tres bizcochos hice, siguiendo la receta de añadir cacao a la mezcla para darle ese sabor característico.
Con los tres bizcochos hechos, levanté la forma de la montaña, superponiendo hasta 3 pisos de bizcocho para, posteriormente, embadurnarlo todo de crema de cacao. (recordad que, además del sabor, eso evita que cuando lo recubra de fondant, éste traslade las imperfecciones del bizcocho a la superficie)
Tuve que comprar una cantidad industrial de fondant blanco. Mirad que pedazo de bola que hice!
Por cierto, este fondant también tenía sabor a limón y sigo insistiendo que es mucho más agradable al gusto que el fondant normal.
Después de recubrir la estructura de bizcocho de fondant blanco simulando la nieve, empecé con el lago, que estaba hecho con caramelo azul.
Para conseguir el efecto agua del caramelo, cogí varios caramelos azules, los derretí en el microondas y, con un rodillo, aplané la masa resultante.
Acabé de completar con fondant blanco las orillas del lago y empecé a trabajar los detalles, como los abetos nevados o los adornos en forma de copo de nieve.
Para los árboles hice un cono de fondant, lo clavé en un palo (como de pincho moruno) y le dí la forma con unas tijeras.
Luego, con tinte verde, hice varias trazas en los árboles para dar la sensación de las ramas asomando por debajo de la nieve.
Para los copos de nieve, utilicé un molde específico con 3 tamaños que compré.
Finalmente, adorné con perlas de caramelos azules el centro de los copos.
Una vez finalizados los detalles, ya tuve lo que es el pastel acabado, aunque faltaba añadirle el fondo de paisaje que había encargado. (lo que hizo mi equipo de asesores fue revelar en el Fotoprix la imagen que habían tratado, a un tamaño de 120*50 cm)
Y aquí podéis ver el pastel acabado sin el complemento que os he comentado.
Aprovechando que la fiesta de celebración era en Cunit (Tarragona), pude hacer varias fotos con luz natural, que siempre dan una calidad de imagen incomparable (por lo menos para los que no tenemos equipos de iluminación artificial profesionales)
Aquí podéis ver un detalles de las hermanas y de Olaf, el muñeco de nieve.
Y aquí el pastel desde otro ángulo (vaya! parece que el lago helado refleja la luz del sol y todo!)
Y eso es todo para esta primera entrada del pastel de Frozen.
No te pierdas la segunda parte de la historia en esta
otra entrada del blog.